Control y detección de deslizamientos de ladera a través de la tecnología GIS

Actualmente estamos colaborando con el Instituto Geológico y Minero (IGME) en un proyecto de prevención de riesgos geológicos en las Islas Canarias. El objetivo es, a través de la tecnología GIS y haciendo uso de datos públicos, detectar zonas donde se han producido desprendimientos rocosos o deslizamientos de ladera para poder caracterizar las zonas de mayor riesgo en función de los resultados del estudio. Este proceso proporcionará los datos básicos necesarios para la realización de análisis y modelos de desprendimientos rocosos.

Por un lado, estamos haciendo uso de la tecnología LIDAR (Light Detection and Ranging). Se trata de un sistema láser que permite medir la distancia entre el punto de emisión hasta un objeto o superficie. Lo que se mide realmente, es el tiempo que tarda ese láser en llegar a su objetivo y volver del mismo, y con ello se calcula la distancia entre los dos puntos.

El resultado es una nube de puntos con valores X, Y, Z. Nosotros hemos obtenido los datos del PNOA para nuestras zonas de estudio que han sido generados por LIDAR aerotransportado en dos períodos distintos (2009 y 2015). Partiendo de dicha nube de puntos, seleccionamos los que se corresponden al suelo, que es lo que nos interesa para el proyecto, descartando los puntos que se corresponden con vegetación, edificios, agua, etc… Realizamos modelos digitales del terreno y los comparamos, obteniendo zonas donde se ha producido un incremento de altura y otras donde esta ha disminuido. A posteriori hay que revisar los resultados, pues no todas las variaciones de altura se producen por deslizamientos de ladera, puede haber otras causas, generalmente de carácter antrópico.

Deslizamiento detectado con LIDAR. La zona roja indica perdida de altura y la verde, ganancia. A la derecha imagen de Ortofoto actual de la misma zona.

Por otro lado, estamos haciendo uso de la tecnología InSAR (Interferometría radar de apertura sintética). Se trata de una técnica RADAR basada en el estudio del patrón de interferencia de fase de las ondas de dos imágenes que se obtienen desde satélites o aeronaves. Este patrón de interferencia o interferograma se utiliza para generar mapas de desplazamientos de la superficie terrestre o de la elevación de terreno y es muy utilizado para medir las modificaciones provocadas por eventos naturales como los volcanes, los terremotos, inundaciones, deslizamientos, etc.

Para este método, utilizaremos los servicios Copernicus, que ofrece de forma libre las imágenes de los Satélites Sentinel, con muy buena cobertura para Europa ya que ofrecen datos cada 6 días. Estos satélites pueden operar independientemente de que sea de día o de noche y de las condiciones meteorológicas. Las propias imágenes que ofrecen ya puedan aportar información, pero para determinar si ha habido desplazamiento es necesario aplicarles un análisis con software especializado.

Copernicus Sentinel 1

Siempre intentamos mostrar a través de nuestra experiencia la utilidad que pueden tener las distintas tecnologías GIS. En este caso, partiendo únicamente de datos libres a los que cualquiera puede acceder, hemos sido capaces de detectar los deslizamientos y movimientos de ladera ocurridos en una zona concreta y en un espacio temporal determinado. Además del riesgo que este tipo de procesos geológicos pueden suponer para la vida de las personas, está el daño a estructuras y el coste asociado de su reparación. Con este tipo de estudios tratamos de destacar la importancia de la prevención en cuanto a riesgos geológicos y lo rentable que puede llegar a ser si logramos anticiparnos a los procesos con estudios como este.

Por Sergio Infanzón